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El Jengibre (Zingiber officinale) está catalogado como un antiinflamatorio natural, apto para el consumo humano en múltiples formas o presentaciones. Su tallo subterráneo se considera un ingrediente fundamental de la medicina tradicional asiática desde hace más de 2.000 años.
Su particularidad terapéutica lo posiciona como una cura para todo, desde dolores crónicos hasta nauseas; caracterizándose por ser un tratamiento de suma eficacia sobre molestias estomacales.
Los compuestos fenólicos que posee el Jengibre cuentan con gran potencial terapéutico para aliviar la irritación del tracto gastrointestinal ocasionado por el movimiento de alimentos y líquidos a través de éste; y estimulan la producción de saliva y bilis, suprimiendo las contracciones gástricas.
En concreto, el Jengibre si favorece notablemente a la digestión y no permite el desarrollo de efectos secundarios a causa de una mala absorción de los alimentos. Por medio de sus múltiples beneficios ayuda a estimular el páncreas y acelerar la producción de enzimas, ambos factores de suma importancia para la sana digestión.
Las principales dolencias o irregularidades que sufre nuestro sistema digestivo pueden desarrollarse en épocas o situaciones en las que se presenta un desajuste de la estructura de la rutina alimenticia habitual, repercutiendo directamente en el proceso digestivo.
Curiosamente, las épocas decembrinas son las principales desencadenantes de afecciones y problemas al sistema digestivo, a causa de la variabilidad gastronómica y el consumo de ciertos alimentos en grandes proporciones.
Patologías o condiciones como la gastritis, reflujo gástrico y esofágico, síndrome de intestino irritable e incluso la colitis o diarrea, son desarrolladas por el consumo excesivo y anormal de comidas picantes y altas en grasas, en conjunto con la ingesta de bebidas alcohólicas.
Las condiciones anteriormente mencionadas suelen ser pasajeras, sin embargo, al no contar con un cuidado intestinal adecuado, pueden convertirse en patologías habituales inclusive crónicas. La multifuncionalidad terapéutica del Jengibre puede ser cómodamente aprovechada en todos estos casos.
El Jengibre en su composición cuenta con elementos químicos denominados gingeroles y shogaoles, principales factores coadyuvantes del proceso digestivo. También actúan eficazmente sobre la reducción de los síntomas de náuseas, vómitos y diarreas.
El Jengibre actúa sobre la aceleración de las contracciones estomacales permitiendo una rápida extracción de los alimentos depositados en el estómago causantes de la indigestión. Esta milagrosa y benéfica raíz terapéutica puede ser agregada a su dieta alimenticia sin ningún problema, ya sea en alimentos o en infusiones.
La infusión del Jengibre se considera un potente remedio natural para eliminar o reducir en gran proporción los gases estomacales. Más allá de modificar los hábitos de alimentación para evitar el desarrollo de irregularidades digestivas, se puede recurrir al uso de ingredientes naturales como el Jengibre, ideales para el bienestar del tracto gastrointestinal.
Delgado, S. R. (Julio 24, 2019). Beneficios del Jengibre. Obtenido de https://www.muyinteresante.es/salud/fotos/beneficios-del-jengibre/1
Parajó, D. A. (Diciembre 20, 2018). ¿Cuáles son los problemas gastrointestinales más comunes en Navidad y cómo evitarlos? Obtenido de https://www.albertoparajo.com/cuales-son-los-problemas-gastrointestinales-mas-comunes-en-navidad-y-como-evitarlos_fb23469.html
Vicente, M. (Enero 15, 2018). ¿Cómo tomar Jengibre para los gases? Obtenido de https://www.mundodeportivo.com/uncomo/salud/articulo/como-tomar-jengibre-para-los-gases-remedio-muy-efectivo-47765.html
